La verdadera historia detrás del nombre y el logotipo

Kikkoman es una de las escasas marcas de salsa de soja auténtica. Es conocida y apreciada en todo el mundo por su calidad y, todo lo que necesita saber sobre ella se encuentra en el nombre y el logotipo.

Durante siglos, la salsa de soja fermentada naturalmente se ha utilizado para condimentar la cocina asiática, sobre todo en Japón. Actualmente, la Salsa de Soja Naturalmente Fermentada Kikkoman realza el sabor de los alimentos en numerosos países, desde el Mediterráneo hasta Escandinavia y desde Asia hasta América. No es casualidad que Kikkoman sea el líder mundial del mercado de la salsa de soja. Además, tenemos uno de los logotipos más famosos del mundo.

Todo está en el nombre

El nombre Kikkoman® tiene un significado muy especial, como muchos nombres japoneses. En japonés “Kikko” significa caparazón de tortuga y “man” 10.000. Según la leyenda japonesa, las tortugas viven hasta los 10.000 años y son símbolo de felicidad, éxito y longevidad.

Estos elementos también son los que la empresa se esfuerza por conseguir, razón por la cual el nombre Kikkoman y el logotipo se desarrollaron hace muchos, muchos años. El hexágono característico se compone de un simbólico caparazón de tortuga y el símbolo kanji japonés para el número 10.000, uniendo “tradición” e “innovación”.

Desarrollado con esmero

Cada botella lleva el famoso logotipo negro de Kikkoman. En 2008 se introdujo uno nuevo de color naranja. Este color cálido evoca al sol o a las llamas, y representa la “buena salud”, la “frescura juvenil” y la “vitalidad”. Además, también tiene propiedades estimulantes del apetito, por lo que hace a este nuevo logotipo aún más especial.

La icónica botella de diseño, desarrollada por Kenji Ekuan, también contribuyó a hacer de Kikkoman una marca destacada e inconfundible. Esta silueta es única y reconocible en todo el mundo.

Bello e inteligente: un diseño icónico clásico

El diseño es una fuente de mejora de la vida
by Kenji Ekuan
Ese era el lema del diseñador industrial japonés Kenji Ekuan, que a lo largo de los años desempeñó un importante papel en el diseño de envases y logotipos japoneses. Una de sus más famosas creaciones es el estético dispensador de la Salsa de Soja Naturalmente Fermentada Kikkoman, que data de 1961.
1.
La elegancia se une a la practicidad

Su silueta curvada y discreta inscripción hacen de este envase un objeto realmente atractivo por su sencillez, elegancia y modernidad. Esta botella de diseño engalana las mesas de hogares y restaurantes de todo el mundo. Dispone de un vertedor de forma perfecta para dispensar con precisión y limpieza pequeñas cantidades o incluso gotas de salsa de soja sin que gotee.

Como resultado, esta botella de estética agradable es tanto una práctica ayuda para cocinar como un decorativo condimento de mesa. Gracias a su tapón de rosca y a su material apto para el lavavajillas, la botella de diseño puede reutilizarse una y otra vez.

2.
Un secreto es revelado

¿Te has preguntado alguna vez por qué hay dos agujeros en el tapón de la botella dispensadora de Kikkoman? En realidad, se trata de un ingenioso diseño que permite regular la velocidad con la que se vierte la salsa de soja, tal y como demuestran aquí los chicos de Bosh.tv, que lo han bautizado como el “Agujero de control”.

3.
El arte de disfrutar

Hoy en día, la botella de diseño es un auténtico sello distintivo de la salsa de soja Kikkoman. Fue galardonada con el premio Lucky Strike Designer Award en 2003 y, durante muchos años, ha estado expuesta en el Museo de Arte Moderno de Nueva York y en el Design Zentrum Nordrhein-Westfalen de Alemania. El dispensador de culto no solo es legendario, también es práctico.

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